martes, 4 de agosto de 2015

Por un salario mínimo igual a la canasta familiar

[Vamos! Nº 57]  Nuevo Salario Mínimo Vital y Móvil no cubre ni media canasta familiar.










El Salario Mínimo, Vital y Móvil pasará de $4.716 a $5.588 el 1º de agosto y $6.060 el 1º de enero de 2016. Bajo el comando del Poder Ejecutivo, el Consejo del Salario fijó los nuevos montos el pasado martes 21 de julio. Contó con la participación de representantes de la UIA y distintas cámaras empresarias, y de una dócil delegación encabezada por Antonio Caló (CGT Balcarce) e integrada por Andrés Rodríguez (UPCN), Gerardo Martínez (Uocra), Omar Viviani (Taxistas) y también de la CTA oficialista (Pedro Wasiejko de Neumáticos), entre otros. Cristina Kirchner cerró el encuentro repitiendo una vez más que el poder adquisitivo del salario mínimo vigente en Argentina es el más elevado de la región. Sin embargo, a las pocas horas el propio Caló debió reconocer sin ruborizarse que “para vivir dignamente se necesita arriba de 8.500 pesos, eso sin tirar manteca al techo”, a confesión de parte…

El Salario Mínimo afecta en forma directa sólo a unos 300 mil trabajadores; pero funciona como un valor de referencia para los millones de trabajadores en negro que son alrededor del 33% del total (unos 3,8 millones). Según la ley de Contrato de Trabajo, “salario mínimo vital es la menor remuneración que debe percibir en efectivo el trabajador sin cargas de familia, en su jornada legal de trabajo, de modo que le asegure alimentación adecuada, vivienda digna, educación, vestuario, asistencia sanitaria, transporte y esparcimiento, vacaciones y previsión”.

Para ser más precisos, de acuerdo a los números publicados por la Junta Interna de ATE–INDEC (el 13 de febrero 2015), la canasta familiar “para un Hogar constituido por una pareja con dos hijos menores es de $12.228 pesos a diciembre de 2014. Este valor se compone de $3.922 en la Canasta Alimentaria Mínima y $ 8.306 en otros bienes y consumos mínimos. Por lo tanto, el nuevo Salario Mínimo fijado no llega a cubrir ¡ni el 50%!