Ningún trabajador debería ganar menos de 15.677 pesos. Ese es el valor de la canasta de consumos mínimos para una familia con dos hijos y sin vivienda propia elaborado por la Junta Interna de ATE-INDEC. Este cálculo significa un aumento de 28,2% durante 2015.
“Hoy presentamos un instrumento para la discusión paritaria. El mismo surge de datos oficiales de las direcciones de estadísticas de las provincias de San Luis, Neuquén y la Ciudad de Buenos Aires. El resultado es una canasta de consumos mínimos de 15.677 pesos. Eso no quiere decir que sea el salario que se va a discutir, sino el mínimo para que cualquier sindicato discuta su paritaria”, describió Raúl Llaneza, delegado general de la Junta Interna de ATE INDEC antes de la conferencia de prensa que brindaron en la sede de ATE Nacional el pasado 29 de enero. Días después, el pasado 5 de febrero, la denuncia continuó en la calle en un nuevo abrazo al INDEC a 9 años de la intervención.
El comunicado de la Junta Interna de ATE-INDEC indica que “Frente a la imperiosa necesidad de contar con una referencia para actualizar diferentes valores, especialmente los salarios, se realiza un ejercicio de estimación para acercarse a lo que serían actualmente los valores requeridos para cubrir las necesidades de los trabajadores y trabajadoras y su núcleo familiar”. Este valor se compone de 5.008 pesos de “Canasta alimentaria mínima” y 10.669 pesos en “Otros bienes y consumos mínimos”. Este cálculo significa un aumento del 28,2% con respecto al mismo cálculo para diciembre de 2014.
Para tener una idea de qué tan mínimos son estos gastos, podemos tomar como ejemplo el costo del alquiler, que según Dirección de Estadísticas del Gobierno de la Ciudad constituye el 20% de la canasta total para el caso del grupo familiar considerado. Según este cálculo, el gasto en alquiler de vivienda rondaría los 3150 pesos. A modo de comparación: un alquiler de dos ambientes en el barrio de Parque Patricios de la Capital Federal es en promedio 6.100 pesos (Clarín, 11/2/16).
Por eso, los gremialistas aclararon que este “ejercicio de estimación” no sustituye los datos faltantes a causa del desmantelamiento de las estadísticas públicas, denunciado todos estos años por los trabajadores del INDEC. En cualquier caso, más allá de que se busque un nivel óptimo o deseable de ingresos, ningún trabajador debería ganar –de bolsillo- menos que el valor calculado en este ejercicio.
En relación a la normalización del INDEC, Raúl Llaneza reclamó que se incluya a ATE en ese proceso, aunque balanceó el retorno de los técnicos como un triunfo de la lucha de los trabajadores.