Unidos. El reclamo es llevado adelante por originarios qom, pilagá, wichi y nivaclé.
Solidaridad. La participación de la Agrupación Clasista Lucha y Trabajo
El viernes 31 de julio, día de la Pachamama, llegó a Buenos Aires un micro con más de sesenta representantes de los pueblos qom, pilagá, wichi y nivaclé prevenientes de Formosa, con el objetivo de apoyar y fortalecer el acampe que hace más de cinco meses sostiene la organización de pueblos originarios QoPiWiNi en Avenida de Mayo y 9 de Julio. Llegaron en la tarde a Retiro, donde fueron recibidos por los compañeros originarios que se encuentran acampando, acompañados por organizaciones sociales y de derechos humanos.
Desde allí dos mil personas marcharon hacia Plaza de Mayo, pasando por el Obelisco. La columna fue encabezada por los originarios con un cartel que rezaba: “la tierra es nuestra vida, 5 meses más 500 años esperando”. En el Obelisco, Eduardo Díaz, hijo del dirigente Félix Díaz, manifestó que “venimos a acompañar a nuestros hermanos que están acá [en el acampe] desde hace más de cinco meses. Venimos porque aunque nos ignoran, no bajamos los brazos y no nos vamos a ir sin una respuesta”. Posteriormente la columna pasó por Plaza de Mayo para terminar con un acto en el acampe en avenida de Mayo.
El viaje de los 60 hermanos originarios de las 4 comunidades se preparó desde hace 15 días con mucha solidaridad para que puedan viajar y continuar el acampe. El sindicato de Aceiteros puso $10.000. También donó fondos el Centro de Estudiantes de Arquitectura y Diseño (UBA). Mucha gente donó carpas, colchones, frazadas y camas.
En el acto numerosos representantes de los pueblos originarios denunciaron el permanente hostigamiento que sufren tanto de parte del Estado como de los terratenientes que usurpan sus territorios. Además denunciaron la situación en que viven los pueblos originarios, principalmente la falta de acceso a la salud, la educación y trabajo. También hicieron uso de la palabra Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, y Pablo Pimentel de APDH La Matanza.
Ya han pasado más de cinco meses desde que los originarios de la provincia de Formosa decidieron por segunda vez acampar en Buenos Aires para hacer visible sus reclamos. Principalmente reclaman el cumplimiento de leyes y tratados internacionales que hacen a los derechos sobre sus territorios ancestrales. Estos son apropiados por terratenientes y empresas, con complicidad de los gobiernos, para hacer negocios. Piden ser recibidos por la presidenta antes de que termine su mandato, pero sólo fueron recibidos hace un par de semanas por el secretario de derechos humanos, que hasta ahora no ha dado respuestas.